A Impresores, una empresa de historia

La capacidad instalada en prensas planas, rotativas y digitales, garantiza óptima calidad, plazos acotados y costos competitivos. Contamos con 8 prensas para tirajes medianos y largos, en distintos papeles y hasta 10 colores, incluyendo la aplicación de barnices en línea, además de un taller digital de tirajes cortos.

Los inicios

La pasión por la impresión de los hermanos Aguirre-Vargas se inició en los años 40, cuando acompañaban a su padre a la Editorial Pacífico, Don Hernán Aguirre Mac-Kay, quien siempre tuvo el sueño de crear su propia imprenta. En 1977, ese sueño se hizo realidad. A pesar de que su cercanía con el mundo de los libros había iniciado hace décadas, todo comenzó a tomar forma con la fundación de la división de impresión de Editorial Antártica. Allí se montaron las primeras máquinas, en un galpón de calle Rosas, muy cerca del actual Teatro Teletón.

El objetivo de Don Hernán fue ser una imprenta única e innovadora, con vocación de servicio y que privilegia a cada uno de sus colaboradores, con el fin de consolidar un equipo con la camiseta puesta, que ama su trabajo y que hace lo imposible por satisfacer a nuestros clientes.

Don Hernán inició así el camino que lo convertiría en el fundador de una de las imprentas comerciales más importantes del país y, siguiendo con la tradición de mantener los negocios en familia, designó a su hijo Carlos como responsable de la comercialización y producción de la nueva división.

Los primeros clientes

La imprenta partió con un grupo reducido de equipos: dos máquinas de un color, una bicolor, preprensa y encuadernación. Gracias al surgimiento de las áreas de marketing y publicidad de las empresas nacionales, la imprenta pudo expandirse y ganar sus primeros clientes como: Chiprodal-Nestlé, Fensa-Mademsa y el Colegio de Ingenieros.

Llegada la década de los 80, también aparecieron las máquinas rotativas y el primer cliente en aprovechar este avance tecnológico fue la revista Buen Hogar Cocina. Pasaron de 6 a 100,  colaboradores y comenzaron a imprimir textos escolares, a través de la editorial Santillana; también se sumaron los catálogos de multitiendas, como Falabella, y revistas.

Nuevos cambios llegan

A mediados de la década de los 80, la Editorial Antártica se traslada de la calle Rosas a la planta actual, ubicada en Pajaritos.

En los años 90 decidieron dar un salto al exterior y abrir el mercado dentro de Argentina y Brasil, primero con las exportaciones, para luego abrir una planta en Argentina y una oficina comercial en Brasil.

A lo largo de esta historia, también se sumaron durante un tiempo, inversionistas extranjeros. En el 2001, los cambios producidos gracias a la intervención de las inversionistas, repercutieron en la empresa y así se creó un nuevo concepto de negocios: pasar de ser una imprenta y convertirse en una empresa de servicios, con un modelo integracionista que buscaba fidelizar a los clientes y establecer relaciones de largo plazo, para transformarnos en su socio estratégico.

Después de un par de años y distintos movimientos dentro de la empresa, la familia Vargas volvió a sus orígenes, poniendo fin a 18 años de sociedad con multinacionales, que les permitió posicionarse a la vanguardia de la industria gráfica nacional y latinoamericana.

En 2015 se inicia una nueva etapa para la empresa, bajo el nuevo nombre de  A Impresores, luego de poner fin a las sociedades extranjeras.

Gestión medioambiental

El compromiso medioambiental que ha tenido A Impresores siempre ha estado fuertemente ligado a todos sus modelos de producción. La instalación de post-quemadores, la optimización de los sistemas de eliminación de residuos líquidos y sólidos y el uso de papeles certificados, demuestran el serio compromiso con el cuidado del medioambiente de parte de A Impresores. El objetivo es mitigar el impacto de nuestros procesos productivos para garantizar un planeta más saludable para las futuras generaciones.

La empresa fue calificada como “inofensiva”, según el Servicio de Salud Metropolitano del Ambiente (SESMA).

Planta propia para el tratamiento de residuos industriales líquidos y perfeccionamos los sistemas de evacuación de residuos sólidos, superando las normativas ambientales vigentes.

Reconocimiento de impresión sustentable, por ASIMPRES

Somos partes del Acuerdo de Producción Limpia (APL), del sector imprentas

Certificación PEFC, que garantiza que nuestros productos son impresos en papeles fabricados en forma sustentable, a través de la implementación de una cadena de custodia.

En A Impresores nos encargamos de asesorarte en todo el proceso de producción, con el fin de que los proyectos que nazcan en nuestra imprenta, sean todo un éxito. ¡Te esperamos!

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